Semanas 31 a la 34
El feto alterna períodos entre dormido y despierto, y puede darse cuenta de la diferencia entre luz y oscuridad a través de las paredes abdominales y uterinas.
La investigación ha mostrado que las orejas se desarrollan suficiente para oír y responder a los sonidos, como la voz de la madre y el latido del corazón.
Se cree que es capaz de sonreír, hacer muecas, distinguir sabores, puede mover su mano frente a su cara y chupar sus dedos. Esta práctica le ayudará a localizar el camino hacia el pecho después del nacimiento.
Las madres encuentran que si su bebé está dando puntapiés o está retorciéndose mucho, puede ser calmado al sentarse en una silla mecedora.