No vale la pena pensar en el día en que tengas que volver a tu trabajo; aprovecha al máximo el tiempo de permiso de maternidad para estar tiempo completo con tu bebé, dale todo tu cariño y haz la relación de los dos lo más unida posible. A lo mejor pedirte que te olvides de el día en que tengas que volver al trabajo es un poco difícil pero esa es una realidad que no podrás evitar.

Una de las cosas que debes hacer cuando ya te falte poco para volver a tu antigua rutina es organizarte en ciertas cosas sobre el día a día de tu hijo:

– Dale tetero con tu leche de vez en cuando.

– Sácate leche cuando puedas para tener reservas cuando no estes , evitando así angustias de última hora.

– No le quites el pecho por completo, recuerda que la lactancia crea una unión entre tu y tu bebé insólita.

– En la medida en que los tetero que le den en tu ausencia sean de tu leche estarás ayudando a que tu bebé siempre te tenga presente.

– Busca una persona responsable y cariñosa que cuide a tu bebé

– Recuerda aprovecha el tiempo de permiso para crear una relación estrecha entre los dos.

Disfruta cada momento que puedas: Cambiarle los pañales, dormirlo en tu brazos, sentarte a observarlo, darle una caricia, no pienses en que porque alguien vaya a cuidar a tu bebé él te vaya a olvidar.

El amor de madre e hijo es insuperable.