Durante el embarazo, es muy común que la madre sufra de hinchazón en los pies y los tobillos, lo cual se denomina edema. Esto ocurre cuando el líquido se acumula en los tejidos durante el embarazo, por lo que esta hinchazón suele estar acompañada de dolor y, por lo general, la inflamación empeora a medida que avanza el día.

¿Es común este síntoma?

Los especialistas afirman que este síntoma es muy común en el embarazo, ya que una de cada cuatro mujeres sufre de esta molestia.

¿Por qué se producen los edemas?

Una mujer embarazada experimenta grandes cambios físicos, uno de los más característicos es el crecimiento del útero, el cual puede ejercer una enorme presión sobre las venas pélvicas. Dicha presión provoca que la sangre circule de manera más lenta, por lo que tiende a acumularse en las extremidades inferiores. De esta forma, los líquidos son expulsados hacia los tejidos, provocando así los edemas.

¿Cuál es la mejor posición para dormir?

Los especialistas recomiendan que las mujeres embarazadas duerman sobre su lado izquierdo, de tal manera que se libere presión sobre la vena cava y la sangre pueda circular con mayor fluidez, evitando así los edemas.

¿Cuándo se debe llamar al médico?

Es normal que las madres presenten inflamación en los pies, tobillos y hasta los dedos durante el embarazo. Sin embargo, si esta inflamación se presenta en otras zonas del cuerpo, como alrededor de la cara, la madre deberá consultar con su médico inmediatamente.

Además, si nota que la hinchazón es más pronunciada en una extremidad que en otra, es preciso llamar a su médico.

¿Cómo se pueden reducir las molestias causadas por los edemas?

• Manténgase bien hidratada
• No utilice medias que sean muy ajustadas
• Mantenga las piernas elevadas siempre que sea posible.
• No cruzar las piernas al sentarse
• No utilice ropa apretada
• Use zapatos cómodos
• Haga ejercicio regularmente