Tanto la madre como el padre desempeñan un rol determinante en la vida de sus hijos, por lo que s de suma importancia que el padre comparta tiempo de calidad con su niño. Los especialistas afirman que los niños son más pacientes, sufren de menor frustración y manejan mejor el estrés cuando su padre está involucrado e interesado en la vida de sus hijos.

¿Qué influencia tiene un padre en la vida del niño?

Un padre involucrado hace que el niño se sienta seguro emocionalmente. Los especialistas indican que los papás tienen un impacto directo en el bienestar de sus hijos, sobre todo en el desarrollo de sus habilidades lingüísticas y cognitivas, así como también el bienestar psicológico, mejor desenvolvimiento en las relaciones sociales y buen desempeño en el área educativa.

¿El papel del padre es menos importante que el de la madre?

En muchas sociedades existe la idea de que la madre desempeña un rol más importante que el padre en la vida del niño, la cual es errada. Los especialistas aseguran que tanto la madre como el padre son de suma importancia para el desarrollo y bienestar de su hijo, ya que ambos transmiten rasgos en su personalidad.

¿El padre debe ser una figura que induzca miedo?

Muchos padres tienden a tener un carácter muy fuerte con sus hijos, lo que conlleva a que estos les tengan miedo. Es importante que el padre no provoque miedo en sus hijos sino que, por el contrario, debe estar presente para satisfacer sus necesidades físicas y emocionales.

A continuación, ofrecemos una serie de conceptos muy útiles para fortalecer el lazo entre el padre y sus hijos:

• Un juego de mesa siempre es una mejor oportunidad para compartir e interactuar que un juego de vídeo
• Pase tiempo de calidad con sus hijos. Para ello, puede realizar actividades que ofrezcan la oportunidad de comunicarse e interactuar.
• Comparta las responsabilidades con su pareja para satisfacer los requisitos emocionales, sociales y académicos con su hijo
• Sonríale y abrace a su hijo a diario, esto lo hará sentirse seguro
• Cocine para su hijo. De vez en cuando, podría pedirle que lo ayude a cocinar
• Tómese 10 minutos al día para leerle un libro a su hijo, contarle una historia o preguntarle cómo le fue en su día
• Hable y pregúntele cosas siempre con un tono amistoso, de tal modo que su hijo sienta que puede hablar libremente con usted
• Comparta con su hijo en áreas abiertas y entornos naturales