Los médicos recomiendan la dieta keto para una gran cantidad de afecciones médicas, como la diabetes, el síndrome de ovario poliquístico (SOP) y la epilepsia. ¿Pero qué tan seguro es realmente durante el embarazo?

«Por razones éticas obvias, no tenemos ningún estudio que diga que es seguro estar en la dieta cetogénica durante el embarazo, por lo que realmente no puedo abogar por ella», dice Christine Greves, MD, una ginecóloga obstétrica certificada por la junta. de Orlando Health.

Los pocos estudios que están disponibles específicamente resaltan los peligros de no tener suficiente ácido fólico durante el embarazo, explica el Dr. Greves. Ella dice que los carbohidratos que se encuentran en los granos como la harina de trigo, el arroz y la pasta son ricos en ácido fólico, lo cual es muy importante para el desarrollo fetal, especialmente durante el primer trimestre.

Las mujeres que consumen una dieta baja en carbohidratos durante el embarazo corren un mayor riesgo de tener un bebé con defectos del tubo neural, lo que puede hacer que el niño desarrolle afecciones como anencefalia (un cerebro poco desarrollado y un cráneo incompleto) y espina bífida, según un estudio nacional de prevención de defectos de nacimiento. Esa es parte de la razón por la cual, en 1998, la FDA requirió la adición de ácido fólico a muchos panes y cereales: para aumentar la cantidad de ácido fólico en las dietas generales de las personas. Desde entonces, ha habido una reducción de alrededor del 65 por ciento en la prevalencia de defectos del tubo neural en la población general, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).

A pesar de los peligros potenciales de comer bajos en carbohidratos durante el embarazo, se pueden hacer algunas excepciones para las mujeres que tienen afecciones médicas como la diabetes y la epilepsia. «En medicina, hay que sopesar el riesgo frente a los beneficios», dice el Dr. Greves. «Entonces, si tiene epilepsia o diabetes, algunos de los medicamentos utilizados para tratar esas afecciones pueden terminar siendo más dañinos para el feto. En esos escenarios, la dieta cetogénica podría ser una alternativa no farmacológica aceptable para controlar los síntomas y garantizar una seguridad el embarazo.»

Pero como algunas personas siguen la dieta keto para bajar de peso, el Dr. Greves señala que la pérdida de peso no se recomienda durante el embarazo, ni tampoco una dieta que no haya probado antes. «En cambio, debes concentrarte en nutrir tu cuerpo y a tu bebé en crecimiento. Al restringir los granos integrales ricos en carbohidratos, los frijoles, las frutas y ciertos vegetales, fácilmente puede faltar la fibra valiosa, las vitaminas y los antioxidantes».

¿Línea de fondo? Si tiene alguna pregunta sobre su dieta mientras está embarazada, siempre es una buena idea hablar primero con su médico. Le ayudarán a tomar la decisión correcta para su cuerpo y su bebé.

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