¿Es seguro levantar pesas durante el embarazo? (Parte II)
Consultamos con Battles y con otros expertos en el tema, para descubrir cómo puede mantenerse activa una mujer embarazada sin poner en peligro a un feto en crecimiento.
¿Debo levantar pesas cuando estoy embarazada?
En todos los metanálisis y en los artículos de opinión de expertos sobre el tema, hay algunos aspectos generales en los que todos pueden estar de acuerdo. Uno de ellos es que probablemente no deberías estar en un régimen de levantamiento de pesas intensivo durante el embarazo si no has levantado antes.
Ciertamente, puedes comenzar a hacer ejercicio y levantar pesas ligeras, pero no deberías ocuparte repentinamente de la construcción de cuerpos competitivos mientras estás literalmente construyendo otro cuerpo, otra vida.
Pero supongamos que eres una persona que ya ha levantado peso y quiere continuar. Hay formas de seguir con seguridad y, lo que es más importante, hay buenas razones para hacerlo.
Varios artículos de revisión sobre el tema señalan que un beneficio que a menudo se pasa por alto durante el embarazo es la mejora de la salud mental. Incluso los no deportistas obtienen beneficios de salud mental. Esto basado en que el ejercicio se asocia con una reducción del 67 por ciento en el riesgo de la depresión prenatal.
Y luego está el aumento de peso. En las recomendaciones oficiales de 2019 de la Sociedad Canadiense de Obstetras y Ginecólogos, el panel observa que menos del 15 por ciento de los pacientes cumplen con los 150 minutos semanales de actividad física recomendados durante el embarazo. Esto lleva a un alto porcentaje de que las mujeres embarazadas ganan un exceso de peso que luego es difícil de perder más adelante.
Las tasas de obesidad materna han aumentado en los últimos 30 años, y esto puede estar impulsando el aumento de complicaciones como la preeclampsia, la hipertensión gestacional y la diabetes mellitus gestacional. La actividad física durante el embarazo reduce todas las probabilidades de todas estas condiciones.
Además, muchas de las preocupaciones que solían tener los obstetras (que el ejercicio aumentaría el riesgo de aborto involuntario o parto prematuro o bajo peso al nacer) no se han verificado. De hecho, los estudios sugieren que el fortalecimiento de los músculos especialmente en la espalda, podría ayudar a reducir el dolor a medida que crece su vientre.
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