Los efectos del tabaco y alcohol en el desarrollo cerebral del bebé (Parte I)
En un estudio de ‘Trust Source’ publicado por investigadores de la Universidad de Columbia en Nueva York, los investigadores estudiaron 1.739 parejas de madres y recién nacidos desde diciembre de 2011 hasta agosto de 2015.
Los participantes eran de Sudáfrica y la región de las llanuras del norte de los Estados Unidos.
Los niños nacieron entre las 37 y 41 semanas de gestación, nacimientos únicos, y las madres no pudieron usar medicamentos psiquiátricos durante el embarazo. La actividad cerebral de los bebés se midió durante el sueño.
«Lo que estaban obteniendo son estos bebés a término que de otra manera son saludables», dijo la Dra. Susan Walley, profesora de pediatría en la Universidad de Alabama en Birmingham. «Este es realmente un estudio bien diseñado, para decir que vemos diferencias observables en bebés con incluso una baja exposición al alcohol y al tabaco».
«Los patrones de EEG en los recién nacidos tienen el poder de predecir los resultados del desarrollo», dijo Walley a Healthline.
Numerosos estudios anteriores ‘Trust Source’ ya han determinado que la exposición prenatal al alcohol (PAE) y la exposición prenatal al tabaco (PTE) durante el embarazo pueden tener consecuencias en la salud de un niño.
En el estudio de hoy, los investigadores señalaron que «PAE es la principal causa de discapacidad intelectual prevenible, y fumar durante el embarazo es una de las causas más modificables de morbilidad y mortalidad perinatal”.
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