El sangrado de encías durante el embarazo o gingivitis: causas y riesgos para el bebé
Durante el embarazo, es muy común que la madre experimente algunos síntomas que pueden ser desagradables, los cuales se deben a los cambios físicos y hormonales que está presentando su cuerpo. Uno de estos síntomas es el sangrado de las encías, el cual les puede causar preocupación a muchas madres, sin embargo, esto es totalmente normal y muy común.
¿Cuáles son las características de la gingivitis?
Este síntoma característico del embarazo tiende a inflamar, sensibilizar y provocar sangrado en las encías.
¿Es común el sangrado de las encías durante el embarazo?
Los especialistas aseguran que alrededor del 50% de las mujeres embarazadas presentan una inflamación de las encías que puede provocar sangrado de las mismas.
¿Por qué ocurre?
Uno de los cambios que produce el embarazo es el aumento de la cantidad de sangre en el cuerpo de la madre, lo que produce dichos síntomas. De igual manera, los cambios hormonales provocan que las encías reaccionen a la placa bacteriana provocando que se inflamen con más facilidad.
¿Qué consecuencias podría traer este problema?
Aquéllas madres que presenten este problema y no acudan al tratamiento, tienen un mayor riesgo de sufrir preeclampsia, tener un parto prematuro o que el bebé nazca con bajo peso.
¿Qué ocurre si no se trata?
La gingivitis no tratada puede provocar que la infección llegue a los dientes, es decir, al hueso y que se convierta en una periodontitis.
¿Cómo se previene?
Para evitar las molestias causadas por la gingivitis, así como también los posibles riesgos para el bebé, lo más recomendable es asistir al odontólogo cada cierto tiempo para que se pueda identificar cualquier problema a tiempo y se hagan los respectivos tratamientos preventivos. A su vez, tener una buena higiene dental reducirá los riesgos de padecer esta condición.
¿Cuándo llamar al médico?
Si sufre de sangrado frecuente de las encías, presenta inflamación, problemas de mal aliento o antecedentes de gingivitis, lo más recomendable es pautar una cita con el odontólogo para hacer el tratamiento pertinente.