Superando los inconvenientes del embarazo
Poco a poco transcurrieron los meses y ahora estás más próxima al parto. En esta fase vivirás otros cambios en tu organismo en relación a las vías respiratorias, el insomnio, las urgencias urinarias, los dolores musculares y abdominales.
Algunas mujeres experimentarán congestión nasal, hemorragias en las encías, erupciones cutáneas o secreciones vaginales copiosas, pero inofensivas. También los estrógenos y la progesterona incidirán en la proporción de tus senos, aumentándolos de tamaño y dándoles una coloración distinta a los pezones.
Los pecho serán más pesados y sensibles al tacto, porque se están preparando para la lactancia. La areola que rodea los pezones se tornará más oscura y aparecerán allí pequeños nódulos llamados Tubérculos de Montgomery.
El síntoma es más común entre las embarazadas primerizas y en mujeres con busto grande. La buena noticia es que esta molestia tiende a desaparecer después. No existe un método específico para tratar esta contrariedad, aunque mejora con el uso de un sostén que brinde un buen soporte. La secreción de calostro, ocasionada por el aumento de la prolactina, es frecuente al final de la gestación, aunque se puede presentar con anterioridad.
Abdomen bajo control
Las contracciones uterinas generalmente indoloras, tienden a agudizarse al final dela gestación. El tratamiento favorece la ingesta de analgésicos por vía oral, rectal o intramuscular, de 3 a 4 veces al día. Si los dolores persisten, es posible que se haya iniciado el trabajo de parto.
Es frecuente la sensación de desgarro en la línea media del pubis cuando la embarazada intenta ponerse de pie. Este dolor se origina debido al peso del útero sobre los ligamentos de la pelvis y la pared abdominal.
Respira bien
En los dos últimos meses, la embarazada tiende a presentar complicaciones respiratorias durante el ejercicio moderado o el reposo boca abajo. Esta es una característica pasajera y ocurre porque el útero como ha aumentado de tamaño- empuja las vísceras hacia el diafragma, interfiriendo con lo movimientos respiratorios. El problema es mayor cuando el feto es voluminoso o se trata de un embarazo múltiple.
Es apropiado que se disminuyan las actividades físicas y cuando te recuestes en la cama lo hagas de lado con varias almohadas para apoyarte. La palpitación es otro síntoma común en los últimos meses de gestación. Si ya has asistido a unas clases para prepararte para el parto, cuando llegue el momento te sentirás más segura y hasta podrás ayudar con toda tranquilidad y observar el milagro de la vida. Mucha suerte en esta etapa final de tu embarazo.