Los 2 años de edad es una edad difícil, hay mucha presión en alcanzar la meta de entrenar al niño para ir al baño. Muchas veces forzarlo tempranamente antes de que este listo puede prolongar el proceso.
El entrenamiento no tendrá éxito hasta que el niño supere el extremo negativismo y la resistencia a ser entrenado.
El debe querer hacerlo. A algunos niños les toma más tiempo que a otros.
Mantenga una actitud relajada y sin presionarlo, felicítelo por cada logro, no mencione sus errores, no lo castigue o haga sentir mal.
Es un proceso lento, hay que tener mucha paciencia. Ya va a ver que lo logrará.