La placenta a través del embarazo, sufre unos cambios evolutivos, que muchos autores hacen referencia a ella como diferentes grados de madures. Sobre la base de los cambios evolutivos han surgido diversas clasificaciones desde el punto de vista ecográfico, siendo la propuesta por Grannun en 1979 la más conocida. Que tienen importancia clínica dependiendo a que edades gestacionales suelen observarse o si la madre esta presentando alguna patología. Placenta grado 0: Se caracteriza por una placenta cuyo parénquima ecograficamente se ve homogéneo e igual con las placas basal (cerca del Utero) y cono la placa corial (Cerca del feto), se ven isoecóicas (es decir presentan la misma ecogenicidad) Placenta grado I: Son placentas que ya poseen áreas ecorrefrigentes (color blanco al eco) de pequeño tamaño. La placa corial se identifica ciertas calcificaciones finas y onduladas, y la placa basal no presenta calcificaciones. Placenta grado II: Consiste en las placentas donde la placa basal se identifica en su totalidad y da la impresión de estar separada del miometrio y en la placa corial se visualiza con un perfil muy ondulado con calcificaciones difusas: Se observa tabique que penetran en el parénquima desde ambas capas pero sin llegar a confluir entre sí, y la placenta no es homogénea debido a las diferentes ecogenicidades en su espesor por el deposito cálcico. Placenta grado III: Son las placentas con gran deposito de calcio a todos los niveles, la placa basal y corial aparecen altamente ecorrefrigentes, con tabique fusionados entre sí, dibujando los cotiledones placentarios y en cuyo interior se pueden observar áreas de calcificación y degeneración.Otros autores utilizan en vez de esta clasificacion de cuatro grados de 0 al III, una de I al IV, donde se corresponden las caracteristicas de la placenta en forma correlativa.