Durante el embarazo, el único medio que tiene el bebé de recibir los nutrientes que necesita para su desarrollo dentro del vientre materno es a través de la alimentación de la madre. Es por esta razón que la dieta y alimentos que incorpore la madre durante la gestación de su bebé son muy importantes para que reciba todos nutrientes, de manera tal que pueda crecer sano y fuerte.

Pero, ¿qué ocurre con aquellas mujeres que sufren de trastornos alimenticios? En estos casos, la madre tendría una deficiencia nutricional considerable, lo que podría provocar no sólo problemas en su salud, sino consecuencias graves e irreversibles para el bebé.

¿Qué son los trastornos alimenticios?

Se denomina trastorno alimenticio a una serie de condiciones en los que la persona presenta una distorsión de su auto-imagen corporal, razón que lo lleva a desarrollar hábitos alimenticios nocivos para la salud. Los trastornos alimenticios mas conocidos son:
• Bulimia
• Anorexia

¿Qué consecuencias tienen los trastornos alimenticios durante el embarazo?

Los estudios indican que los trastornos alimenticios en el embarazo pueden aumentar las probabilidades de:
• Sufrir un aborto espontáneo
• Muerte fetal
• Sufrir un parto prematuro
• La madre puede tener deficiencia en la cantidad de líquido amniótico
• Desarrollar preeclampsia. Si desea obtener más información sobre esta condición y sus síntomas, visite: /articulo/causas-sintomas-y-tratamiento-de-la-preeclampsia
• Defectos de nacimiento
• El bebé puede presentar retraso mental
• La madre tiene mayor probabilidad de desarrollar diabetes gestacional
• El bebé nace con bajo peso o restricción de crecimiento intrauterino
• Presentar complicaciones durante el parto
• El bebé tiende a ser más pequeño que los otros niños de su edad durante la infancia
• El bebé puede presentar problemas para socializar durante su infancia
• El bebé puede morir en su primer mes de vida
• El bebé puede desarrollar ictericia. Si desea obtener más información sobre esta condición, visite: /articulo/que-es-la-ictericia
• La madre puede desarrollar depresión posparto